Las costumbres de los consumidores están cambiando. Cada vez se deja más de lado la tienda física y se apuesta más por el comercio electrónico. Al menos es lo que refleja un informe detallado y minucioso que se ha elaborado partiendo de una macro encuesta a varias tiendas online. ¿Tiene techo esta tendencia? ¿Se estabilizará, evolucionará más o acabará estancándose?
El Observatorio eCommerce es una asociación de empresas que agrupa a varios de los actores más relevantes en la actualidad del comercio online. Su objetivo es realizar una labor didáctica favorable al crecimiento del ecommerce en España. Recientemente, desde esta entidad han publicado un informe muy revelador al respecto. Partiendo de nada más y nada menos que 20.000 entrevistas a distintas tiendas online, en él se reflejan conclusiones por lo general optimistas sobre el sector.
De cara a comprometerse con la representación del mayor número de identidades empresariales y geográficas, entre los encuestados hay todo tipo de negocios. Los sectores que más presencia tienen, con un 17% cada uno, son el de la moda y los servicios profesionales. Les siguen la informática y la belleza, con un 10 y un 9%, respectivamente. También hay lugar para la alimentación, la cultura o los artículos deportivos.
En el Informe de evolución y perspectivas eCommerce se concluye que el mercado del comercio electrónico está en un momento álgido. No sólo eso, sino que la sensación de los emprendedores encuestados durante la elaboración del estudio es muy positiva. De este modo, se entiende no sólo que el presente es saludable, sino que el futuro puede ser muy esperanzador.
El documento indica, por ejemplo, que alrededor del 90% de las tiendas online preguntadas prevé incrementar sus resultados el año siguiente. Tanto es así que el 63% de ellas cifran ese anhelado aumento ganancial en más del 10%.
De igual modo, el 48% de los empresarios encargados de administrar negocios de índole digital admiten que sus previsiones pasan por subir la tasa de personal laboral contratado. En total, calculan crear una media de dos puestos más de trabajo por compañía.
Por otra parte, el estudio recalca que el 51% de las tiendas online que participaron en él espera cruzar las fronteras comerciales en el futuro, llegando a expandir su negocio al extranjero. Las compañías españolas ven en la internacionalización una coyuntura muy prometedora. En esta idea pesa el hecho de que el saldo neto exterior nacional sea bajo. Este indicador establece la diferencia entre lo que se compra desde fuera a plataformas digitales españolas y lo que se adquiere desde dentro al extranjero. Pese al buen momento protagonizado por el ecommerce, este medidor sigue pesando como un ancla para algunos empresarios.
Otros datos sugerentes aportados por el informe hacen referencia al gasto medio de los usuarios. Hoy en día, el importe base del consumidor online oscila entre los 50 y los 100 euros. Hasta el 39% de los navegantes se corresponden con esa cifra.
No obstante, el 65% de las tiendas digitales cree que ese gasto se incrementará con el paso del tiempo. Si hay más usuarios, significa que el medio cuenta con mayor confianza, y por lo tanto repercutirá sobre las inversiones, que dejarán de ser tan específicos e irán abriendo el abanico. Cada vez hay más gente usando Internet para comprar, por lo que no es una expectativa vacía. Entre ellos cada vez es mayor el número, además, de los que lo hacen a través del móvil. Para el 40% las tiendas online estas transacciones equivalen ya al 10% de su caja.
Pese al crecimiento del ecommerce en España hay, también, aspectos que merecen una revisión. Por ejemplo, en el uso de las redes sociales. Los encuestados siguen desempeñándose con demasiada timidez en este aspecto. Mientras que en otros países de Europa y sobre todo de América y Asia las redes son un gancho fundamental para seducir nuevos clientes, la mayor parte de las tiendas online preguntadas a este respecto (hasta un 89% de ellas) no acaban de lanzarse.
De hecho, se calcula que el gasto publicitario en redes sociales para redirigir clientes y aportar información de interés sobre los productos es, de media, menor a 5.000 euros anuales.
Y no será porque la actualidad no dé pistas sobre las posibilidades de este uso. Sin ir más lejos, Instagram ha anunciado que lanzará en España una función de shopping. La mejora, ya testeada con éxito en otros países, ofrece la posibilidad a las empresas de etiquetar productos en sus publicaciones, facilitando de esa manera su compra.
Si se pretende que el crecimiento del ecommerce en España no sea una anécdota, se debe trabajar para seguir las prioridades del consumidor y darle una atención más personalizada. Pero, ¿qué quieren los compradores?
Si atendemos a otra encuesta, en esta ocasión realizada a consumidores en lugar de vendedores, observamos que hay algunas actitudes de las que sería conveniente tomar nota. De acuerdo con el III Estudio Confianza Online & Showroomprive, la moda lidera las preferencias de la gente. Dentro de este sector, la ropa, el calzado y los artículos para niños son los productos estrella. Los complementos no le andan a la zaga, y por eso gafas de sol y relojes incrementan sus ventas año tras año.
Lo más interesante, no obstante, viene cuando se pregunta a los encuestados por sus preferencias personales. De cara a continuar la tendencia alcista del ecommerce, ha de tenerse presente que un 63,13% de los españoles valora muy positivamente los gastos de envío gratuitos, hasta el punto de llegar a decidirse por una compra sólo por ese hecho. La cifra es incluso mayor a la de usuarios que valoran por encima de todo la calidad del producto (un 59,36%). Otras circunstancias muy apreciadas por los clientes de estos servicios son la facilidad para devolver productos y la marca.
En resumen, queda mucho por hacer, aunque se está caminando en la dirección correcta. Evaluando bien estos factores, así como invirtiendo más en redes sociales y marketing digital, se darán los pasos adecuados para consolidar el comercio electrónico en España.